3 de enero de 2007

Luz

Las gotas de lluvia caen amartillando el silencio.
La nocturna luciérnaga traspasa el marco de la ventana,
enciende por fragmentos la obscuridad,
deja rastros de su luz en la penumbra.
Yo la miro absorta,
hundida en la inmensidad de mi cama.
La miro trazar figuras de luz,
luego desaparecer.

Foto: Antona

6 comentarios:

Anónimo dijo...

UNA VEZ MAS HACIENDO USO DEL SUTIL PERO CAOTICO SENTIDO QUE TIENES AL ESCRIBIR Y AYUDARNOS A EXPRESAR LO QUE LOS DEMAS SENTIMOS PERO NO SABEMOS DECIR.....CHARLIE'06
CIAO....

10:08 AM

Clarice Baricco dijo...

Quiero una luciérnaga que alumbre mi brevedad en el camino.

María Elisa Quiaro dijo...

suspiro

Lis dijo...

mirar el infinito en una gota...
hermoso...intenso...profundo..

Antona dijo...

Muchas gracias por el honor
bss

Rosa Silverio dijo...

Qué hermoso, Sandra. Ya te imagino en la oscuridad, con los ojos abiertos.